A medida que la tecnología continúa avanzando exponencialmente, las barreras de entrada, comercialización y aprendizaje se están erosionando. Los nuevos participantes en el mercado con acceso a nuevas herramientas y soluciones de automatización industrial, pueden operar a una escala mucho menor, lo que les permite crear ofertas que alguna vez fueron competencia exclusiva de los principales operadores tradicionales. Si bien la producción a gran escala siempre dominará algunos segmentos de la cadena de valor, surgen modelos de fabricación innovadores (fabricación local distribuida a pequeña escala, ecosistemas de fabricación poco acoplados y fabricación ágil) para aprovechar estas nuevas oportunidades.
Mientras tanto, el límite que separa a los fabricantes de productos de los vendedores, es cada vez más permeable. Los fabricantes están sintiendo la presión (y ganando capacidad) para aumentar tanto la velocidad de comercialización como la participación del cliente. Y numerosos factores están llevando a las industrias a fabricar bajo demanda, en lugar de hacerlo para almacenar. En este entorno, los intermediarios que crean valor manteniendo inventarios son cada vez menos necesarios.
Juntos, estos cambios han dificultado la creación de valor de forma tradicional. Al mismo tiempo, a medida que los productos se vuelven menos objetos de valor por derecho propio y más los medios para acceder a información y experiencias; la creación y captura de valor ha pasado de entregar objetos físicos a permitir ese acceso.
Estas tendencias pueden afectar a diferentes sectores manufactureros a diferentes ritmos. Para determinar la velocidad e intensidad de los próximos cambios en un sector en particular, las empresas deben considerar factores que incluyen el alcance de la regulación, el tamaño y la complejidad del producto y el nivel de digitalización del sector.
A medida que estas tendencias se manifiestan en un número creciente de sectores manufactureros, los grandes operadores tradicionales deberían centrarse más en los roles que pueden conducir a la concentración y consolidación, evitando al mismo tiempo aquellos propensos a la fragmentación. La buena noticia es que tres roles impulsados por importantes economías de escala y alcance (proveedores de infraestructura, plataformas de agregación y negocios de agentes) ofrecen a los titulares una base sólida para el crecimiento y la rentabilidad. Debido a las presiones competitivas, los grandes fabricantes pueden experimentar una imposición cada vez mayor para centrarse en un solo rol, eliminando aspectos del negocio que podrían distraer la atención de la empresa, para que se convierta en una empresa de clase mundial en el rol elegido. El resultado probable es una reestructuración significativa de los fabricantes de productos existentes.
Dada la aparición de ecosistemas más complejos de actores fragmentados y concentrados en una gama cada vez mayor de cadenas de valor de fabricación, las empresas que comprenden los “puntos de influencia” emergentes, tendrán una ventaja estratégica significativa. A medida que el panorama de la fabricación evoluciona y aumenta la presión competitiva, impulsada por las necesidades de clientes cada vez más exigentes, la posición será más importante que nunca.
En todas las decisiones sobre dónde y cómo jugar en este nuevo entorno, no existe un libro de jugadas maestro, ni un camino único hacia el éxito. Pero al comprender estos cambios, roles y puntos de influencia, tanto los titulares como los nuevos participantes pueden darse las herramientas para navegar con éxito en el nuevo panorama de la fabricación.Haz clic aquí para editar.